. Centro eucarístico - La Adoración Nocturna - Las Camareras de JS
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SANTO Y APÓSTOL, TEÓLOGO Y TROVADOR DE JESÚS SACRAMENTADO SUS FUNDACIONES: El Centro Eucarístico de Madrid
SUS FUNDACIONES: El Centro Eucarístico de Madrid
El Centro Eucarístico de Madrid fue otra de las Fundaciones de Trelles que inicia sus pasos a finales de 1872.
¿Qué era el Centro Eucarístico de Madrid?
Para responder a esta pregunta nos valemos de la reseña de la página 81 y siguientes de la Lámpara del Santuario de Marzo de 1873: PARTE ASCÉTICA. CENTRO EUCARÍSTICO.
Lo primero que podemos decir es que se trata de una asociación seglar, hecho que reitera Trelles en la reseña, bajo el amparo y auspicios de la Iglesia. El grupo inicial está compuesto por catorce individuos y con el nombre de Centro eucarístico se inauguró en Madrid el 8 de Diciembre de 1872 y la autoridad eclesiástica del arzobispado de Toledo aprobó y autorizó su establecimiento canónico, el 26 de Febrero de 1873.
Hasta que se redacten y aprueben los "estatutos o reglamento adecuados al objeto de la misma" el Centro se regiría, interinamente, "por las bases redactadas en el acta inaugural". (Ahí se ve al jurista).
¿Qué propósitos guiaban a los fundadores del Centro?
Algo muy sencillo y de gran calado: "fomentar la devoción a Jesús Sacramentado, y contribuir, por todos los medios más conducentes y posibles, al mayor decoro y esplendor del culto eucarístico". Piensan los fundadores que tal idea "ha de ser agradable a los ojos de Dios Nuestro Señor, y que convenientemente desarrollada, puede ser al mismo tiempo de gran utilidad para la Iglesia".
El propio Trelles nos dice en la misma crónica: "Los tiempos (humanamente hablando) son malos para fundar agrupaciones análogas; pero estos tiempos, en lo que conduce al Altísimo, son los mejores, porque al emprender la obra anunciada, nos hemos colocado mentalmente en torno del Señor". Es frecuente, resulta tópico referirse a los malos tiempos que corren para el desarrollo de tal o cual idea. El siglo XIX, en cuyas fechas más duras a Trelles le tocó vivir es, para la predicación y desarrollo de la vida espiritual, infinitamente peores que los actuales. Y sin embargo, plantó la semilla y floreció y dio sus frutos.
Trelles fue un hombre de fe, de fe eucarística, acrisolada y robustecida con largas horas de meditación ante el Sagrario que le haría escribir: "Agrupémonos, pues, en torno al Maestro; despertémosle, con la oración incesante y la comunión fervorosa y agradecida, de su místico sueño sobre la leve y blanca nube que le oculta en la hostia, y vendrá en nuestro auxilio".
Tal fe hace que se crezca ante las dificultades robustecido por la idea que tan bien expresó San Pablo en Fil 4, 13.: "Todo lo puedo en Aquél que me conforta". Esa fe le hace afirmar: "Pues bien: cuando se conmueven los seculares fundamentos de la sociedad, acudamos nosotros al tabernáculo de Dios con los hombres; cuidemos de su culto y de su decoro; fomentemos su comunión sacramental frecuente y digna; proveamos a las necesidades de su culto en cuanto a su vida eucarística atañe; enfervoricemos a nuestros hermanos en esta santa empresa, atrayendo así al foco que llamamos Centro Eucarístico, las oraciones, las comuniones, los recursos materiales, y la cooperación activa espiritual y temporal de los que creen en la presencia real de Jesús en los altares, y después de haber llevado a cabo esta buena obra, nos veremos, sin pensarlo, protegidos, escudados y defendidos por Aquel, cuyo brazo no se ha abreviado, y que camina sobre las alas de los vientos".
Lo transcrito expresa el qué, el por qué y el cómo del Centro Eucarístico de Madrid. Todo ello lo encuadra en cuatro apartados, bases fundamentales del Centro, que sintetizamos así:
1ª Proteger moral y materialmente al Culto continuo al Santísimo Sacramento,
2ª Subsidiar la publicación de la revista eucarística La Lámpara del Santuario, y cooperar a su redacción y mayor suscripción, para extender más y más las prácticas y la devoción eucarística.
3ª Establecer en Madrid, y cuando sea posible, en toda España, la Adoración Nocturna al Santísimo Sacramento.
4ª Fundar y establecer una sección especial, que se ocupe de allegar recursos para socorrer los sagrarios menesterosos, las lámparas sacramentales que no pueden sostenerse, y proveer a las iglesias pobres de los vasos y paños sagrados de inmediato contacto con la sagrada Hostia y son el Cuerpo y Sangre Santísimos de Jesús.
Trelles, anuda entre sí todas sus fundaciones, apoya unas en otras con el objetivo puesto en hacer realidad su sueño eucarístico: Conseguir, en toda España, La Adoración Nocturna al Santísimo Sacramento y por su fe puesta a prueba, el Señor Jesús: el de Tiberiades y Cafarnaúm, el del Jordán y Canaán, el del Tabor y el Gólgota se lo concedió.
En el Centro Eucarístico florecieron diversas secciones, "con vida propia", pero unidas por la misma fe.
La humildad de Trelles hacía que su nombre no apareciera por parte alguna. Solo sus funciones : el Secretario, el Director de la Revista. Un adorador de Madrid. Sin embargo se percibe su mano de fundador quien, con su mentalidad de jurista, dota a cada una de la estructura organizativa precisa para su funcionamiento. Así por ejemplo, la reseña fundacional dice:
"El Centro Eucarístico ha nombrado: un presidente y un vicepresidente seglares y un tesorero, y ha aceptado como secretario el que lo es del Culto continuo y director de la revista mensual, reuniéndose el centro uno de los primeros días del mes, que suele ser el primer viernes dedicado al culto del Corazón de Jesús, o el primer domingo, que tiene señalado la Virgen Santísima para muchas festividades; y en cada reunión hacen los socios una colecta secreta, único recurso que por ahora tiene".
Es decir se preocupa de que haya quien dirija y represente, levante acta de las reuniones y demás actos dignos de ser recordados y los medios de financiación y sustento de la organización. El carácter seglar de sus asociados y cargos, reconocidos por las autoridades eclesiásticas y bajo el auxilio espiritual del Director espiritual nombrado por el Sr. Obispo de la diócesis.
Otra característica es la descentralización y autonomía de las secciones sin menoscabar la obediencia debida al Ordinario del lugar y la necesaria comunicación en una correspondencia fluida a la que el Fundador prestaba personalísima atención y daba cuenta minuciosa a través de La Lámpara.
Su fe en la fuerza de la oración le hará decir: "Para este grandioso objeto, que humildemente esperamos que Dios con el tiempo nos permitirá alcanzar, o más bien a nuestros sucesores, que lo merecerán más, hemos de menester las oraciones de nuestros abonados y lectores, ante todas cosas, y que ofrezcan en la comunión incesantes preces a Dios para que lo conceda".
Finalizamos esta primera aproximación a la Fundación del Centro Eucarístico de Madrid con estas palabras de Trelles: "Rogamos a nuestros amados en el Corazón de Jesús Sacramentado, que den gracias a Dios por la fundación de la Sociedad, aprobada ya por la Iglesia, y que no lo olviden en sus oraciones, así como con sus limosnas y la de sus amigos".
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